La facturación, por su parte, ha ascendido a los 395,1 millones de euros, lo que supone un incremento del 8 por ciento respecto a lo facturado en la campaña anterior.
Con una producción total ligeramente superior al año pasado (solo varia un 2 por ciento), aun cuando las hectáreas plantadas han sido casi un 9 por ciento menos que entonces, termina la campaña de la fresa con un precio medio muy similar al de la pasada, un 1,5 por ciento superior, según los datos estadísticos aportados por las empresas asociadas.
La recolección se adelantó casi un mes respecto a otras campañas, debido a un invierno muy benigno climatológicamente, favoreciendo la calidad de la fruta durante los primeros meses y un ritmo de maduración óptimo.
Sin embargo, el comportamiento de la fresa en los mercados y su cotización han sido menos favorables que en el mismo periodo de la campaña pasada, debido al aumento de tonelaje. No obstante, desde mediados de febrero hasta marzo, el consumo ha repuntado y los precios fueron más acordes con los del pasado año. Fue a finales del mes de marzo y principios de abril cuando se produjo el pico de producción, coincidiendo con la Semana Santa, bajando considerablemente los precios como suele ocurrir en años anteriores.
Durante el mes de mayo, la fresa onubense ha competido en los mercados europeos con la fresa local de países como Francia, Italia, Reino Unido, Alemania o Bélgica. Por suerte, la calidad del producto ofertado ha permitido seguir presente en estos mercados durante todo el mes.
El calor de los primeros días de junio ha propiciado el fin de la campaña de manera paulatina en las diferentes comarcas productoras, dado que las altas temperaturas afectan a la calidad de la fruta y a su consistencia.
Los dos destinos principales de la fresa de Huelva siguen siendo Alemania y Francia, con el 30 y 20 por ciento de las exportaciones totales, respectivamente, figurando Reino Unido en tercer lugar con un 13 por ciento.