El sector de la agricultura ecológica española, que forma parte de la Federación Internacional de Movimientos de Agricultura Ecológica (Ifoam), ha formalizado la creación de un grupo de trabajo para «dar voz a los productores ecológicos españoles en Europa».
Así lo han asegurado en un comunicado los miembros españoles de la Federación, que tendrán representación en el grupo sectorial «Farmer Sector Group» de esta organización en la Unión Europea (UE).
Han subrayado que con la creación de este grupo se pretende conectar a los productores ecológicos de ámbito estatal, reactivando al sector para afrontar este momento en el que se está definiendo la aplicación de la Política Agraria Común (PAC) en cada Estado miembro, en particular en los planes de desarrollo rural (PDR) autonómicos, donde se encuadra la agricultura ecológica.
Los trabajos prioritarios del grupo de trabajo -creado por productores ecológicos de la Comunidad Valenciana, Murcia, La Rioja, Cataluña, Castilla y León y Andalucía- serán «reactivar al sector ecológico y a la sociedad, en general, respecto a la situación actual en el mundo agroalimentario y político», para «asegurar el apoyo claro y uniforme de la producción ecológica en la nueva PAC».
Respecto a la política agraria comunitaria, «se actuará para favorecer un marco nacional en relación con la aplicación de las políticas que favorezcan el desarrollo de la producción ecológica, sin que puedan darse agravios comparativos derivados de su desigual apoyo por las comunidades autónomas».
El grupo «tratará de influir para que la medida específica de agricultura ecológica pueda ser considerada prioritaria y dotada de la financiación que asegure su aplicación en este periodo hasta 2020» e incidirá en las administraciones estatal y autonómicas para que «se agilice la puesta en marcha de los nuevos PDR».
Además, «favorecerá la unidad en la defensa de las producciones ecológicas respecto a los transgénicos», puesto que este grupo considera que «España es el territorio de la Unión Europea con más riesgo de contaminación y donde existen más casos de perjuicio a los productores ecológicos».
También considera de gran relevancia trabajar en la flexibilización administrativa y la reducción de la burocracia que se aplica a las actividades productivas ecológicas de transformación y comercialización para favorecer la venta directa en los mercados locales.