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Regantes creen que la solución no es agua desalada, sino traer agua de fuera

El presidente de la Junta Central de Regantes y Usuarios del Trasvase Tajo-Segura, Isidoro Ruiz, ha insistido en que la solución a los problemas del agua de la región solo se soluciona "trayendo agua de fuera", ya que ni el agua desalinizada, ni los acuíferos ni la propia cuenca ofrecen un abastecimiento suficiente.

Así lo ha manifestado en la Asamblea Regional, donde ha comparecido ante la comisión especial de Agua para mostrar su punto de vista sobre esta materia y analizar la situación actual que viven los regantes de la comunidad autónoma.

Ruiz ha lamentado que actualmente el agua procedente del trasvase Tajo-Segura "no llega o llega con miseria" y ante esa situación los regantes no pueden seguir debilitando constantemente la propia cuenca del Segura, ya que no se puede "desvestir un santo para vestir a otro".

En su opinión, la única alternativa para la situación de déficit hídrico de la región es la de estudiar todas las posibilidades para "traer agua de otros sitios".

"El agua desalada no es la solución, tampoco seguir recurriendo a agua de la propia cuenca y seguir esquilmándola de tal manera como se hace, y los acuíferos tampoco son una solución, porque cerca del 70 % de los mismos están totalmente sobreexplotados", ha subrayado.

En ese sentido, ha insistido en que la solución es "traer agua desde fuera" y ha destacado que "el Estado tiene la obligación legal de darnos esa agua, a través de un plan hidrológico o como quiera, pero hay esa obligación legal".

A pesar de todo, ha considerado que la región ha vivido peores situaciones de sequía que la actual, por ejemplo, en los años 1994 y 95, ya que actualmente y "dentro de la gravedad" se da "la suerte de que se puede recibir agua de la propia cuenca y compartirla".

Así, ha subrayado también que debe haber una responsabilidad de todos los regantes, tanto de los que él mismo representa como del Sindicato Central de Regantes (SCRATS) o de la Mancomunidad de Canales del Taibilla, para compartir los recursos hídricos, así como una regulación para garantizar el uso del agua desalada.

Por último, ha mostrado su satisfacción por la puesta en marcha de esta comisión para impulsar que por primera vez todos los partidos regionales tengan una voz común en un tema de tanta importancia y se eviten así las "guerras de guerrillas" entre las formaciones políticas "que nunca han conseguido ningún objetivo".

Por eso, ha solicitado a los diputados que en la próxima reforma del Estatuto de Autonomía se incluya "el agua como objetivo prioritario" como ya ocurre en otras comunidades, ya que sin este bien "es imposible que se produzca el desarrollo de la región".

La Junta Central de Regantes y Usuarios del Trasvase Tajo-Segura engloba en torno a 88.000 hectáreas de regadíos y a un millón de personas aproximadamente, ha detallado.

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