No obstante, existe desconcierto ante esta situación ya que se desnococe el comportamiento de los mercados. La estrategia este año es repartir la fruta en la mayor cantidad de mercados posible, porque éstos se encuentran muy inciertos y es una forma de eludir riesgos”. De esta forma, Antonio Walker, presidente de Fruséptima y director de Fedefruta, comentó las acciones que están llevando a cabo los exportadores frutícolas del país.
Según precisó, “hay sobre oferta de manzanas y peras en Estados Unidos y Europa, que pagan menos en casos como éste. Por eso, estamos tratando de desviar la fruta a mercados de Latinoamérica, al lejano Oriente, el Medio Oriente y al norte de África”, publica Diario El Centro.
El productor también comentó que en la cosecha de cerezas de esta temporada, entre noviembre y los primeros días de enero, Chile llegó a exportar 20 millones de cajas de 5 kilos esta fruta. El 80 por ciento se destinó a China.
Añadió que “además, ha habido productos con problemas de calidad y la fruta mala ensucia mucho el mercado. Esta cereza sufrió lluvia y eso ha hecho que la fruta esté un poco más blanda y presente más problemas de pudrición. Estamos un poco preocupados por cómo va a terminar la temporada de cereza. Todos los envíos finalizaron, la fruta sigue vendiéndose en China y faltan dos semanas fuertes en este sentido”.
Cosecha
“Estamos en el peak de cosecha de peras y de la Gala, que es la variedad de manzanas más importante de la región en cuanto a superficie cosechada”, señaló Walker.
Explicó que “la maduración de la fruta se está produciendo muy rápida y se ha concentrado mucho. Por lo tanto, deberemos cosechar antes y más rápido. Afortunadamente, hemos tenido la gente, pero ya estamos viendo los primeros signos de escasez de personal”.
El director de Fedefruta indicó que “el tipo de cambio está alto y eso nos ayuda mucho, al igual que las bajas tasas de interés. Lo malo es que los precios de manzanas y peras no son muy buenos debido a la sobreoferta de ambas frutas en Estados Unidos y Europa”.
Crisis portuaria
En cuanto a los efectos de la crisis portuaria en la costa oeste de Estados Unidos, en las exportaciones de frutas procedentes de este país y de esta región, Walker opinó que “todo esto molesta, hace ruido y entorpece la logística de un producto perecedero. Siempre hay que tener rapidez en el movimiento en la fruta y hay que cumplir los programas comerciales que uno tiene pactados, porque de lo contrario se alteran los precios y se producen vacíos en los mercados. Además, nunca sabemos en qué plazo se pueden resolver estos problemas”.
