Otras frutas de hueso de reciente cultivo en la región como el paraguayo, nectarina o melocotón también experimentan un importante aumento, no tanto en valor absoluto pero sí en porcentaje, como el paraguayo, que pasa de 730 a 2.000 toneladas (un 174 por ciento más); la nectarina, de 400 toneladas a 1.000 (un 150 por ciento más), y el melocotón, que pasará de 5 a 15 toneladas (un 200 por ciento más).
Sin embargo, el albaricoque disminuirá considerablemente su producción, ya que la pasada campaña se saldó con 16.994 toneladas y la previsión para 2017 es de 10.856 toneladas, lo que supone un descenso del 36,12 por ciento.
Esta importante reducción se debe principalmente a las heladas primaverales y a que en el momento de la floración se registraron más de 30 grados y lluvias que dificultaron su cuajado, según ha explicado el técnico sectorial de Cooperativas, Jesús Ángel Peñaranda.