La Oficina europea para la Lucha Contra el Fraude (OLAF) ha confirmado hoy la entrada ilegal de ajos procedentes del sureste de Asia, «desde hace tiempo», que los exportadores declaraban como manzanas y que supone un fraude de dos millones de euros para los contribuyentes de la UE. La OLAF descubrió esta práctica fraudulenta en una investigación que realizó con los servicios aduaneros de los 27 países comunitarios. Los implicados en esta operación han detectado que esta forma ilegal de entrar ajos a la UE se ha practicado desde «un largo período de tiempo» y que solamente este caso supone un fraude de dos millones de euros para las arcas comunitarias. Asimismo, los productores españoles de frutas y hortalizas denuncian desde hace años esta competencia desleal, por los envíos de ajo chino.
Actualmente, la entrada ajo chino fresco tiene un arancel del 9,6% y un gravamen de 1.200 euros por tonelada neta, excepto para una cuota de 13.000 toneladas.