Ha destacado que según datos de la Encuesta de Salud de la Comunitat del 2010, el 41,6 % de los alumnos entre 0 y 15 años comen habitualmente en el colegio durante el periodo escolar, por lo que cuidar una de las comidas principales del día debería ser «una de las prioridades de los centros escolares y de las empresas de hostelería colectiva que sirven a los colegios».
En este sentido, ha señalado que con el distintivo «Comedor Saludable», los dietistas y nutricionistas quieren «reconocer a los colegios que están haciendo este esfuerzo por su comunidad escolar, en un sentido mucho más amplio que la propia alimentación, al tener una vertiente educativa fundamental, ya que no sólo se trata de dar de comer sano sino de enseñar a comer sano».
Entre las recomendaciones de realizan estos profesionales están que el menú diario ha de incluir todos los grupos de alimentos, reforzando el aporte de verduras, legumbres y fruta fresca, y fomentando el consumo de productos frescos de temporada y de proximidad.
Destacan la importancia de conservar las tradiciones culinarias con recetas locales, así como de presentar platos que resulten agradables, con presentaciones de un mínimo de tres colores diferentes ya que, además, cuanto mayor sea el número de colores, más garantía de contener vitaminas y minerales.



















