Aunque la fruta se regula durante el tránsito, siempre puede sufrir algún daño, afectando a la calidad del producto. El Laboratorio Federal Suizo para la Ciencia de Materiales y Tecnología (EMPA) está llevando a cabo pruebas sobre estos nuevos sensores que pueden medir la temperatura del aire en el interior de un contenedor, detalla Fruitnet.com.
Hasta el momento ha sido posible medir la temperatura del núcleo de la fruta mediante la inserción de una sonda a través de la piel hacia el punto central del fruto.
Esta nueva tecnología permitirá a los investigadores identificar cualquier problema en el proceso de enfriamiento de frutas hasta que el producto llega a su destino. Este dispositivo no sólo permite ajustar la temperatura, sino que también es importante por razones de seguridad alimentaria en términos de requisitos de calidad o cadena de transporte y almacenamiento adecuados.