La cooperativa gaditana Nuestra Señora de las Virtudes da por finalizada la campaña de tomate de verano ante la falta de kilos por los efectos de la Tuta absoluta. Desde hace 3 días ha cerrado su centro de manipulación de tomates y despedirá a una decena de manipuladoras ante la falta de trabajo.
Esta situación se veía venir, ya que la producción de tomates ha descendido en más de un 50 por ciento y las 5.000 toneladas a los que están acostumbrados pertenece a la historia de esta empresa.
La cooperativa está recibiendo visitas desde hace 2 semanas de las empresas fuertes de control biológico como Agrobío para la realización de una serie de ensayos con Tricogramma para conocer los efectos de este auxiliar en el control de la Tuta absoluta.
«Los primeros resultados han sido positivos en cultivos bajo invernadero e incluso en cultivos al aire libre», destaca Bartolomé Ramírez, presidente de la empresa. La empresa espera poder controlar el efecto de la Tuta en la próxima campaña en los cultivos de tomate bajo invernadero.
