En concreto, Mercadona presentará en la tienda de Sevilla un diseño «totalmente renovado» en colores y materiales, y ampliará los espacios para facilitar «luz natural y colores cálidos» en las distintas zonas del interior.
Mercadona también ha planteado transformaciones concretas como la creación de nuevos puntos de acabado para la carne, lineales específicos de leche fresca y zumos refrigerados y ampliación de los pasillos de fruta y verdura.
Mercadona ha defendido que su nuevo modelo se basará en la eficiencia y el respeto al medioambiente, por lo que ha afirmado que sus medidas reducirán «hasta un 40 %» el consumo de energía con respecto a las tiendas convencionales.
Esto será debido a la «mejora del aislamiento térmico y acústico», a la optimización de los materiales en paredes y techos y a la instalación de un sistema de iluminación LED automatizado. Este modelo se aplicará en 126 tiendas españolas de Mercadona durante 2017, para lo que la compañía ha previsto un gasto de 180 millones de euros y 5 millones en I+D+i.