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Los regantes de Alicante, ‘tristes’ al ver desaprovechar la crecida del Ebro

Los agricultores de Alicante se sienten "tristes, defraudados e indignados" al observar que la actual crecida del río Ebro, que amenaza con inundar numerosas ciudades, se desaprovechará porque sigue sin haber una "conexión" con las cuencas deficitarias del sur, que evite que ese agua acabe en el mar.

En declaraciones a Efe, el portavoz de la Federación Provincial de Regantes de Alicante, Ángel Urbina, ha explicado que, además del Ebro, actualmente también hay crecidas por las abundantes lluvias en la cuenca del Duero, por lo que "España tiene el tejado lleno de agua y seco el sur".

"Los ríos están desbordados y todos los inviernos pasa lo mismo. Esto hace que probablemente se de la circunstancia de que el Gobierno tenga que pagar indemnizaciones por inundaciones en el norte y, al mismo tiempo, por la sequía en las comunidades del sur", ha lamentado Urbina.

El portavoz de los regantes alicantinos ha explicado que esta situación se repite cada año y ha puesto como ejemplo que en sólo dos días el caudal actual del Ebro igualaría la cantidad de agua de que podrían producir a lo largo de un año todas las desalinizadoras del país.

Para Urbina, esta situación refleja "el fracaso de la política hídrica de los gobiernos, especialmente del último del PSOE", que derogó el trasvase del Ebro y el Plan Hidrológico Nacional, lo que "obliga a Alicante a consumir agua desalinizada para beber y regar, mucho más cara y medioambientalmente negativa" por el elevado consumo energético que conlleva.

Urbina ha puesto de manifiesto que la Comunitat Valenciana, Región de Murcia y Andalucía precisan de unos 500 hectómetros cúbicos anuales (un hectómetro cúbico equivale a un millón de metros cúbicos).

Esta cifra se podría acumular en pocos días al ritmo del actual caudal del Ebro, que a su paso por Zaragoza alcanza los 1.385 metros cúbicos por segundo.