La mosca de la fruta no es un problema fitosanitario en el limón murciano, porque la acidez y otras características físico-químicas hacen que no sean receptivos a sus ataques, según los primeros resultados obtenidos por el Instituto Murciano de Investigación y Desarrollo Agrario y Alimentario (IMIDA). La mosca de la fruta es un problema fitosanitario en determinadas variedades tempranas y de media estación de naranjo y mandarino, así como en la mayoría de especies de frutales de hueso.
Las hembras de este díptero realizan las puestas debajo de la epidermis de los frutos ya maduros donde posteriormente se desarrollan las larvas, alimentándose de su pulpa y ocasionando los problemas de agusanado. Este díptero, considerado una plaga de cuarentena en EE.UU., «no resulta un problema fitosanitario en las variedades de limón cultivadas en la Región de Murcia».