En un comunicado, la cadena de distribución ha detallado que estas tres tiendas -con una superficie de ventas de entre 1.200 y 1.400 metros cuadrados- sustituyen a los antiguos inmuebles situados en la misma ubicación y que contarán con una plantilla de más de cien personas, la mitad de nueva contratación.
Las tiendas, diseñadas según la nueva imagen de la compañía, se han construido bajo los criterios de eficiencia energética y sostenibilidad medioambiental que Lidl incorpora para sus nuevas aperturas; además de contar con sistemas de refrigeración de bajo consumo, los establecimientos incluyen iluminación LED en todos sus puntos de luz, ha resaltado.
La firma ha añadido que Lidl ha evolucionado del "hard discount" (supermercados de gran descuento) original a un modelo intermedio entre el descuento y el tradicional, más próximo al perfil del consumidor español, y ha potenciado su surtido de productos frescos y de origen nacional.