Latinoamérica

Las huelgas en los puertos de Chile provocan graves problemas económicos

Chile espera una solución a la huelga de los puertos, ya que las producciones de uva y manzana están a punto de empezar y suponen más del 60% de las exportaciones.

El sector exportador chileno se enfrenta a su tercera semana de paro portuario, con paralizaciones de las actividades en los puertos de San Antonio y Bío Bío, así como en otros terminales del país andino.

La paralización de las actividades está generando graves consecuencias para los productores y exportadores de fruta, quienes no pueden exportar parte de sus cajas con frutas o han debido redestinar sus productos a otros puertos, con las consiguientes pérdidas de mercados y precios, algunos incluso optando por los envíos aéreos.

La Federación de Productores de Frutas de Chile (Fedefruta), entidad que agrupa a más de 1.000 productores y 20 asociaciones a lo largo de todo Chile, señaló que ha sido testigo de los esfuerzos desesperados de último minuto por parte de productores que alcanzaron a re-embalar su fruta y la destinaron a otros terminales que ya empezaron a atocharse.

Las consecuencias son varias. Los productores de arándanos han preferido optar por la congelación de los productos y la fruta de hueso mira hacia otros puertos o a destinos cercanos, que se pueden abordar por transporte terrestre.

“Esta tercera semana de paro compromete otros US$70 millones adicionales, pero lamentamos informar que esto no ha hecho más que escalar y que los daños pueden volverse inconmensurables”, señaló el presidente de Fedefruta, Cristián Allendes.

Chile está preocupada porque la campaña de uva empieza dentro de poco y más tarde la de manzanas, «nuestros dos principales productos de exportación. A esto se une el incremento importante de la producción y embalaje de arándanos, lo que hará casi imposible sacar toda la fruta sólo por los puertos de Valparaíso y Coquimbo”, agregó Allendes.

La uva y la manzana supone más del 60 por ciento de las exportaciones frutícolas de Chile. «Estamos hablando que las pérdidas se pueden incrementar en cuanto salga la producción de estas dos frutas», apuntó Allendes.