Las bajas temperaturas que se registran desde hace unos días en la provincia de Huelva retrasarán el inicio de la recolección de la fresa, previsto para principios de febrero, si bien no supondrá una merma en la calidad del fruto. Alberto Garrocho, presidente de Freshuelva, asociación que aglutina a más del 95 por ciento de los productores onubenses, ha asegurado que las condiciones climatológicas actuales no suponen un daño para la fresa en sí, sino que lo único que provoca es «un retraso en la maduración». Ha explicado que si las previsiones iniciales apuntaban a principios de febrero como momento de inicio de la recolección, las bajas temperaturas la retrasarán unas semanas más, lo que supondrá que comiencen estas tareas más de un mes después de lo que lo hicieron el pasado año.
Nacional Ene 2011















