Según informa la UdG, a la que se le asignarán 337.000 euros, esta iniciativa, con una duración de cuatro años y un presupuesto total de 8,4 millones de euros, cuenta con la implicación de veinte instituciones y empresas de todo el mundo coordinados por Neil Audsley, que pertenece a la agencia británica FERA.
El consorcio Dropsa pretende conocer y controlar los daños en los cultivos de hueso, kiwi y fresón como consecuencia de patógenos y plagas, centrados específicamente en los problemas causados por la mosca de la fruta y por bacterias de cuarentena.
Los principales objetivos son determinar las vías de introducción y dispersión de patógenos y plagas en la Unión Europea y estudiar su biología, ecología e interacción en las diferentes zonas, así como desarrollar métodos de control innovadores y programas de protección integrada para el sector.
