Semana especialmente caliente para los ‘categories’ y para los importadores UE porque el mercado alemán ha empezado a disparar sus demandas ante el riesgo de confinamientos selectivos.
Las empresas holandesas están observando un fuerte aumento de la demanda de las cadenas y mayoristas alemanes y las cifras se están desbordando. No son las cadenas alemanas las únicas que desbordan sus demandas.
También lo hacen los mayoristas y cadenas holandesas, que han disparado su demanda porque los casos de Covid 19 se están disparando en varios puntos de Holanda y las categorías de cítricos, tomates, hoja, pimientos o fruta de pepita y banana se elevan en estos días.
Los precios se elevan. Y mientras se incrementan las ventas en supermercados y detallistas tradicionales, las ventas en el canal Horeca se desploman. «Es imposible poder llevar una planificación de pedidos y compras, porque el escenario cambia en 24 horas», señala uno de los ejecutivos históricos de los mayoristas holandeses.
Las ventas de frutas y hortalizas a operadores de cruceros se estaban recuperando y en esta semana «se han anulado todos los pedidos a entregar en esta semana. Es un problema para nosotros», apunta este profesional.
A la delicada situación en Alemania y Holanda, se unen los confinamientos en las ciudades de París, Lyon y Marsella. Estos escenarios están provocando un fuerte repunte de las ventas en el segmento mayorista de Rungis, principal proveedor de las tiendas de barrio y proximidad en París.
