Aunque pepino, tomate y pimiento son los principales cultivos de invernadero, en la agricultura orgánica, la berenjena es probablemente el más importante de todos ellos", ha manifestado la compañía. La empresa ha destacado la importancia de las prácticas de cultivo de los productores, donde se incluye la rotación de cultivos.
Con el objetivo de mantener la salud del suelo, los productores de ecológico alternan en muchas ocasiones tomate con berenjena, mejorando de esta forma la fertilidad del suelo, señala fruitnet.com.
Si se cultiva tomate en el mismo punto, los nematodos microscópicos que se comen las raíces de la planta se convertirán en una plaga. Sin embargo, las berenjenas presentan raíces que repelen los nematodos. Por lo tanto, si se alterna el cultivo de berenjena con tomate, los nematodos desaparecen.