Durante la presentación en Palma del Río (Córdoba) del primer aforo de cítricos, Ortiz ha explicado que esta mejora se debe "a las buenas condiciones climáticas en primavera y a la ausencia de problemas en el cuajado".
Ha destacado que Sevilla permanece como la principal productora -supera las 932.000 toneladas- y se prevé un significativo incremento de la cosecha del 33,2 por ciento.
Durante su intervención, la consejera ha recalcado la importancia de canalizar la oferta a través de las Organizaciones de Productores de Frutas y Hortalizas y otras entidades que permitan generar mayor remuneración para los productores y "que el valor añadido se quede aquí, en Andalucía".
En cuanto a los datos nacionales, se estima que la producción global supere los siete millones de toneladas, por lo que Andalucía aportaría en torno al 30 por ciento de todo el volumen de cítricos de España, la segunda comunidad autónoma tras Valencia (3,9 millones de toneladas).
La comunidad andaluza cuenta con alrededor de 12.000 explotaciones citrícolas, que suman casi 85.000 hectáreas de cultivo dedicadas, principalmente, a naranja (70 por ciento) y mandarina (21 por ciento).
El sector de los cítricos es el tercero en importancia de la actividad agrícola en Andalucía atendiendo a la generación de empleo, con casi siete millones de jornales, de los que un 65 por ciento corresponde a labores de producción (incluida la recolección) y un 35 por ciento a centrales de manipulado.
La recolección de los frutos genera unos 2,8 millones de jornales, el 40 por ciento del total, mientras que en 2015 el valor de la producción citrícola ascendió a 522 millones de euros, montante que supone en torno al 5 por ciento del total de la Rama Agraria de Andalucía.
En el caso de la naranja dulce, cultivo que supone el 75 por ciento de la producción citrícola andaluza, se prevé un aumento del 17 por ciento respecto a la campaña anterior y superar los 1,5 millones de toneladas.
Para la mandarina se espera, sin embargo, una reducción del 9 por ciento (356.838 toneladas), mientras que también descenderá un 4 por ciento la producción de limones (103.285 toneladas) y un 3 por ciento la de pomelos (19.177 toneladas), si bien la naranja amarga verá aumentar su producción en un 19,5 por ciento (12.927 toneladas).
Por provincias, destaca especialmente el aumento que se prevé en Sevilla, un 33,2 por ciento, que es a la vez la que registra mayor producción, concentrando el 45 por ciento del total andaluz (932.291 toneladas).
La segunda provincia con mayor producción citrícola, Huelva, registrará por el contrario un descenso del 14 por ciento (406.583 toneladas), mientras que en Almería se prevé un crecimiento del 24 por ciento (261.542 toneladas), y Córdoba (221.785 toneladas) y Málaga (161.102), experimentarán una disminución del 3 y el 10 por ciento, respectivamente.
También descenderá la cosecha en Cádiz, un 4 por ciento (58.668 toneladas), mientras que la provincia con menor producción, Granada, será la que contabilice el mayor incremento, un 46,4 por ciento (17.912 toneladas).
Por otro lado, Ortiz ha informado de que en la campaña 2015-2016 se produjo una mejora de las ventas en el extranjero, de tal forma que a pesar de que se ha "reducido el volumen de cítricos exportados desde Andalucía casi un 15 por ciento, el valor ha crecido un 3 por ciento, hasta alcanzar los 227 millones de euros gracias a unas mejores cotizaciones".
Sin embargo, la consejera ha señalado que las exportaciones de cítricos en Andalucía apenas suponen un 15 por ciento de lo que se produce, "muy por debajo de Valencia, que exporta más del 60 por ciento de su volumen de producción".
En 2015, el valor de las exportaciones de naranjas andaluzas superaron los 142 millones de euros, mientras que las de mandarina ascendieron a 46,5 millones de euros.
