La morosidad en el sector de la agricultura afectó al 42 % de las operaciones comerciales en 2024, según los resultados del ‘Barómetro de Prácticas de Pago’ elaborado por Crédito y Caución, que ha apuntado este lunes que, además, que el 6 % de dichas operaciones resultaron finalmente impagadas.
Esta compañía especializada en seguros de crédito ha añadido en un comunicado que las empresas consultadas en este estudio se muestran preocupadas por la evolución de las insolvencias.
En concreto, ha explicado que 44 % de las empresas del sector agrícola en España prevé un aumento de los impagos en los próximos 12 meses, en gran medida, por «la incertidumbre climática y las tensiones geopolíticas», que se presentan como los «principales factores de riesgo«.
Crédito y Caución ha destacado que las ventas a crédito suponen casi dos tercios del comercio B2B (transacciones comerciales entre empresas) de este sector.
Retos
A su juicio, los retos más destacados a los que se enfrentan en este tipo de operaciones son «equilibrar las condiciones de los clientes con la estabilidad financiera», según el 36 % de los encuestados, y «la morosidad» (33 %).
En cuanto a las fuentes de financiación, ha indicado que las empresas del sector recurren en mayor medida a los préstamos bancarios (49 %), seguido del crédito comercial (47 %) y de los fondos propios (39 %).
Para hacer frente al riesgo de impago, el 80 % de las empresas agrarias combina las provisiones internas y con una gestión de riesgos externalizada, ha comentado.
De su estudio sobre las prácticas de pago en el sector agrario también ha resaltado que otras «dos grandes preocupaciones para el futuro giran en torno a las crecientes exigencias de cumplimiento normativo y el impacto de la volatilidad de los costes de producción».
Ambas -según Crédito y Caución- «amenazan los márgenes de beneficio y podrían debilitar la salud financiera a largo plazo».