La Indicación Geográfica Protegida (IGP) de manzana italiana Val Venosta ha obtenido la Declaración Ambiental de Producto (EPD en sus siglas en inglés), que confirma su sostenibilidad, junto con otros consorcios de la Asociación Italiana de Productores de Manzanas (Assomela).
Las cooperativas de manzanas de Trentino-Alto Adige de Italia se han sometido a un estudio que ha confirmado los resultados de las técnicas de cultivo y procesamiento de bajo impacto medioambiental practicadas por Manzanas Val Venosta, en aspectos como las emisiones de CO2 generadas, la huella de agua y la ecológica (parte de terreno que necesitará regenerarse por kilo producido.
La conclusión del estudio es que la producción de Val Venosta tiene un impacto sobre el medio mucho menor que la de otros productos agroalimentarios, según han destacado desde la entidad en un comunicado.
Entre las medidas adoptadas para reducir este impacto, figura la implantación de siete plantas fotovoltaicas que han reducido en 4.680 toneladas sus emisiones de CO2 al año, a los que se añaden sistemas de trazabilidad que permiten al consumidor y al vendedor comprobar el origen y trayectoria del producto.
Además, la línea de producción ecológica de la firma, que produce unas 20.000 toneladas anuales (el 7 por ciento del total), se ha acogido a un sistema de trazabilidad que permite obtener información sobre todo el proceso de cultivo y distribución a través de la introducción de un código en los envases.
