Arora anticipa que las importaciones crecerán de unas 1.000 toneladas cada semana a unas 5.000 toneladas cada semana en los próximos diez años. Nueva Zelanda se mantiene como el principal proveedor para el mercado indio.
Sin embargo, también entran en juego otros mercados, como el kiwi de Irán, que es más barato un 50 por ciento en comparación con otros destinos, donde el tiempo de tránsito y el coste es también menor, lo que hace el fruto asequible.