La ministra en funciones española de Agricultura, Elena Espinosa, subrayó ayer la importancia de la candidatura de la dieta mediterránea como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad de la UNESCO, ya que será un «escaparate de producción agroalimentaria» hacia países donde no es conocida. La candidatura es una iniciativa impulsada por España e Italia, entre otros países, y que la ministra presentó hoy en la ciudad de Bari, la capital de la región sureña italiana de Puglia (Apulia), junto a su colega italiano, Paolo De Castro. Espinosa explicó que el objetivo es lograr el reconocimiento internacional de la dieta mediterránea como patrimonio de la humanidad, ya que «forma parte de nuestro legados social, territorial y medioambiental desde hace muchos siglos». Insistió en que la dieta mediterránea va «más allá de los alimentos que componen nuestra alimentación», pues se refiere también «a nuestra forma de comer, de compartirlos, de vivir al aire libre, de disfrutar de nuestro entorno y de nuestro paisaje».
Nacional Abr 2008