Dado que los proveedores sudamericanos también exportan a Estados Unidos y deben abastecer a sus clientes de este país, las ventas en Europa del aguacate cultivado en España se han desarrollado "de forma óptima", según Asaja.
El secretario general de esta asociación en Málaga, Benjamín Faulí, ha afirmado que esta campaña se ha llegado a una cifra récord de facturación incluso a pesar de los daños provocados por el viento y granizo el pasado noviembre, que afectaron a una cantidad importante de plantaciones.
Por tipos de aguacate, la producción de la variedad de piel verde ha sido de 8.800 toneladas, mientras que la de Hass ha sido de 38.700.
Desde septiembre de 2014 hasta el pasado mayo, las ventas al mercado nacional han alcanzado las 9.000 toneladas, lo que supone un mantenimiento respecto a anteriores temporadas, mientras que la comercialización al resto de la UE ha supuesto 37.000, y a terceros países, 1.500 toneladas.
Según Asaja, los ritmos de exportación han sido "potentes" debido a la demanda, y en el primer trimestre de este año ha habido diez semanas con salidas de más de 2.000 toneladas semanales al mercado nacional y exportación.
Las principales zonas productoras de Andalucía son las costas de Málaga y Granada, y la primera de ellas (fundamentalmente la comarca de la Axarquía) representa el 75 por ciento del total en España.
Del análisis de las ventas se desprende que la mayoría del aguacate malagueño se consume fuera de España, principalmente en Francia, Reino Unido y Alemania.
En cuanto a los precios, Asaja destaca la estabilidad durante toda la campaña, con una media de 2,15 euros por kilo para la variedad Hass, frente a los 1,80 euros de la pasada campaña.
Pese a las "grandes cifras" de la campaña 2014/15 y a que el consumo de aguacate está en ascenso, Asaja recalca que cada vez hay más presencia de fruto de terceros países y la situación de escasez de éstos vivida en esta campaña puede ser puntual.
La organización apuesta por aumentar la productividad de las explotaciones andaluzas en los años de bonanza para seguir siendo competitivos en el mercado europeo no solo en calidad, sino también en cantidad, para lo que considera fundamental las nuevas técnicas de cultivo y la investigación.
