Desde la confederación agrícola italiana señalan que la decisión de Moscú de prorrogar la prohibición tras los últimos acontecimientos en Siria, ejerce una fuerte presión de precios en el mercado europeo y en Turquía. Las cifras publicadas por el Grupo de Promoción de Cítricos Turcos señalan que el temor de Italia está bien infundado, ya que en diciembre de 2014 se exportaron a Turquía 378.000 toneladas de cítricos, donde el 43 por ciento tuvo como destino Rusia.
Ese volumen incluye 116.000 toneladas de mandarina y 30.000 toneladas de naranja. Otros destinos de los cítricos turcos fueron Holanda, Alemania o Polonia, entre otros países.
Por su parte, Italia ha visto como su producción de cítricos ha caído en los últimos años. El cierre del mercado ruso a Turquía a partir del día 1 de enero de 2016 pone en peligro el mercado de productos frescos tanto de Italia como de toda Europa. Ante esta situación, el mercado europeo se enfrenta a un gran volumen de cítricos turcos que pueden extenderse a otros países, pisando aún más los precios de los cítricos de la zona euro.