Estas cifras suponen un receso del 6,5 por ciento respecto a 2015 y una caída del 6,3 por ciento si se compara con la temporada 2010-2014.
En España, las zonas de producción temprana de Andalucía, Valencia y Murcia fueron capaces de prever una producción de 29.525, 104.610 y 137.000 toneladas, respectivamente. El volumen combinado de 271.135 toneladas representa una caída del 12 por ciento en 2015, pero un alza del 27 por ciento respecto de la media de los últimos cinco años.
Respecto al norte de Italia, Francia y Grecia, las previsiones tienden ligeramente a la baja con un leve crecimiento en España. La superficie de producción en Italia ha descendido un 5 por ciento, principalmente en el norte del país en el Piamonte y Emilia-Romaña, ya que el sur ha registrado un incremento. Según Gabriele Ferri de Italia y Ortofrutta Naturitalia, esta disminución en la zona de producción está dando lugar a una mejora general de la calidad, con variedades menos atractivas.
El área de producción en Francia ha seguido en descenso, en torno a un 5 por ciento, debido principalmente a problemas de virus en la región del Rosellón y Rhône-Alpes. En cuanto a los niveles de consumo, las expectativas dependen en gran medida de las condiciones climáticas durante el periodo estival, ya que las temperaturas elevadas favorecen el consumo.