Entrevista a David Alba, CEO de Genesis Fresh.
F&H: Genesis Fresh es el primer eslabón de esa gran cadena que es AMFRESH. ¿Qué les aporta como obtentores esta integración vertical?
David Alba (D.A.): “Es una de nuestras mayores fortalezas. Estamos al inicio de la cadena, en el desarrollo varietal, y nuestra prioridad es obtener nuevas variedades que mejoren las que ya hay en el mercado e incentiven el consumo. En AMFRESH somos grandes productores y, a la vez, estamos conectados a diario con el mercado en los cinco continentes, con lo cual entendemos las necesidades de todos los eslabones de la cadena de suministro. Esta integración vertical nos da un ‘know-how’ importantísimo, nos da la capacidad de anticiparnos a lo que demandarán los consumidores en el futuro y, por tanto, nos señala el camino en nuestra estrategia de ‘breeding’ y desarrollo”.
F&H: Y les permite, además, testar cada nueva variedad en todos los eslabones de la cadena…
D.A.: “Así es. Es muy importante que cada nueva variedad funcione tanto para el productor como para la cadena de suministro y el consumidor final. Son los tres vértices del triángulo mágico. Para nosotros, poder testar estas variedades en campo y a lo largo de nuestra cadena de suministro habitual, ver cómo llegan a las tiendas, el ‘feedback’ del consumidor… Todo esto nos da la tranquilidad necesaria para poder escalar el proyecto”.
F&H: Los cítricos son una categoría algo estancada y son muchas las voces que apuntan a la diferenciación como estrategia para reflotarla. ¿Por dónde pasa esa diferenciación?
D.A.: “Actualmente, a mi entender, existen tres tendencias a destacar. La primera, el ‘snacking’. Debemos buscar nuevos productos que aporten la máxima facilidad de consumo y eso, en cítricos, implica desarrollar nuevas variedades que sean muy fáciles de pelar, que no manchen las manos, desgajen bien, no tengan semillas… La segunda es la calidad, que no es nada nuevo, pero es el motivo esencial por el que el consumidor repite la compra y está dispuesto a pagar más. Y la tercera es la salud, que, si bien parece algo inherente a la fruta en general, hay cuestiones como el contenido en vitamina C, antioxidantes o ciertas propiedades que constituyen sin duda un valor añadido para cada variedad”.
F&H: ¿Cómo responden desde Genesis Fresh a estas tendencias?
D.A.: Nosotros hemos desarrollado cítricos muy atractivos, de altísima calidad y vida útil, con nuevos perfiles de sabor, gran contenido de zumo, una increíble facilidad de pelado, totalmente ‘seedless’ y con nuevas propiedades saludables. Buscamos customizar el producto para cada consumidor, porque no a todo el mundo le gusta lo mismo ni puede consumir lo mismo. Por ejemplo, estamos desarrollando variedades pigmentadas, ricas en antocianos, con un alto valor antioxidante; o tangelos ultra-jugosos sin presencia de furanocumarinas y con alta capacidad anti-microbiana; o mandarinas y naranjas de fácil pelado con sabores, colores y formas únicas”.
F&H: ¿Estas tendencias se pueden llevar a todos los cítricos?
D.A.: “Tenemos que hacerlo sí o sí, de otro modo, las categorías en las que no lo hagamos acabarán reduciendo su consumo y posiblemente muriendo. Es lo que ha pasado, por ejemplo, con el pomelo, una categoría pequeña, estancada desde hace años o en declive en la mayoría de países, porque es habitualmente lo contrario a lo que estamos diciendo. Un pomelo blanco estándar, hoy en día, no seduce prácticamente a ningún consumidor nuevo: no se puede pelar con las manos, amarga, tiene semillas, la piel es gruesa, es demasiado grande, no se puede desgajar, es previsible… Va totalmente en contra de los tiempos, por lo que debemos hacerlo más atractivo si queremos que sobreviva. En nuestro caso, hemos desarrollado ‘The ALIZZA Fruit’, un tangelo que se puede pelar con las manos, totalmente sin semillas y con una cantidad y calidad de zumo extraordinaria, que además tiene propiedades saludables y una gran variedad de formatos de consumo… Por otro lado, hemos lanzado, por ejemplo, BANZZAI, con una calidad organoléptica y facilidad de consumo excepcional”.
F&H: La naranja pigmentada ONIX, que se hizo con el Fruit Logistica Innovation Award en 2025, y la clementina con forma de calabaza HALLOWEENA son dos de sus novedades más recientes. ¿Qué aceptación están teniendo en el mercado?
D.A.: “Confiamos en que serán proyectos muy exitosos porque las pruebas piloto que hemos hecho funcionan en los vértices del triángulo que comentaba. Funcionan con el agricultor, al ser muy productivas y fáciles de producir, con altos aprovechamientos y rentabilidades por hectárea. Están más que testadas a lo largo de los procesos de cosecha, confección y exportación, y la acogida ha sido realmente fantástica entre los consumidores”.
F&H: Recientemente lanzaron Havva y Sigal, dos variedades que vienen a complementar a la mandarina ORRi. ¿Cuál es su objetivo?
D.A.: “Clemenvillas y Clemenules son dos de las variedades más populares de la citricultura, si bien, con los años, cada vez tienen más problemas y están quedando obsoletas en muchos mercados. Si antes estaban disponibles de noviembre a marzo, en los últimos años, esa ventana comercial se ha ido reduciendo muchísimo e incluso en diciembre una mayoría de supermercados no las quieren por distintas razones de calidad y vida útil. La irrupción en el mercado de variedades como ORRi desde mitad de febrero en adelante ha solucionado parte de estos problemas con una fruta de excelente calidad, que logra cotizaciones récord en campo y que el consumidor valora muy por encima de otras. Nuestro objetivo con Havva y Sigal, que son mandarinas procedentes del mismo programa genético que ORRi y comparten parental, es complementar la campaña de ORRi desde unos meses antes, reduciendo la dependencia de clemenvillas y clemenules”.