«Es un proyecto que nosotros teníamos en mente», aseguró la consejera de Agricultura y Ganadería, Silvia Clemente, en relación a un «mediador» -ligado a la administración-, y por ello aprovechó ayer una reunión con el consejero para los Asuntos Agrícolas de la Embajada gala en España, Hervé Reverbori, para pedirle información sobre su gestación y funcionamiento. Además de este asunto, analizaron otras aspectos en los que el país vecino y Castilla y León tienen un escenario o problemática similar, como el sector lácteo. En este sentido, la popular avanzó que desde Francia se trabaja en la recuperación de una mesa hispano-francesa de seguimiento sobre este parcela, que sería «muy positiva» para ambos.
Con España y Francia como los dos países que más fondos reciben de la Política Agraria Común (PAC), la reforma de ésta absorbió la mayor parte de la reunión , en la que se recordaron los puntos de encuentro de ambos territorios, como que siga estando «bien dotada» económicamente, la convergencia en los pagos, el rechazo a la tarifa plana y la exigencia de que se tengan en cuenta los costes de producción y los derechos de plantación para el viñedo.
Al margen de la reunión, Clemente insistió en evitar la duplicidad de un servicio público en las cámaras agrarias y señaló que cada una cuenta con personal de la administración «suficiente para elaborar un plan de viabilidad», que es «responsabilidad» de las organizaciones profesionales agrarias.





















