"Japón es un país muy pequeño, nuestro terreno está muy limitado y necesitamos mejorar la productividad de las tierras porque la población crece sin parar", reconoció el experto en una entrevista con Efe durante el Congreso Internacional de Agricultura en Ambiente Controlado 2015, que se celebra del 20 al 22 de mayo en la capital panameña.
Este nuevo modelo de negocio en la producción de alimentos, que nació en Japón, utiliza alta tecnología y permite a los productores planificar los cultivos y alterar a su gusto elementos como la luz, humedad, concentración de dióxido de carbono o flujo del aire.
De tal manera, apuntó el experto, se puede hacer frente a las plagas y al cambio climático y garantizar la seguridad alimentaria de la población que en 2050 alcanzará los 10.000 millones de personas, según estima Naciones Unidas.
El concepto de agricultura controlada, que se puede llevar a cabo tanto en suelo urbano como rural, abarca distintas vertientes como las fincas verticales, las granjas y huertos urbanos y los cultivos hidropónicos.
Hasta ahora se recomienda en el caso de que se quieran cultivar productos frescos y se desaconseja para producir arroz y otros cereales, explicó Kozai, doctor en Ingeniería Agrícola.
En Japón, la agricultura controlada representa actualmente el 1 por ciento de la producción total, según apuntó Kozai, que vaticinó que en 5 años la agricultura controlada "llegará al 10 por ciento del cultivo japonés".
"Llevamos trabajando en esto más de 30 años, pero en la última década el negocio ha empezado a crecer con fuerza", explicó el exprofesor de la Universidad de Chiba, a 60 kilómetros de Tokio, y quien en la actualidad trabaja como asesor del Gobierno nipón.
Para Kozai, la agricultura tradicional no va a experimentar una transformación radical a nivel, pero sí señaló que la producción controlada va a representar un porcentaje "importante" en la producción a pequeña escala.
El Congreso Internacional de Agricultura en Ambiente Controlado 2015, organizado por el empresario y CEO de la compañía panameña Urban Farms, David Proenza, reúne en Panamá a más de 350 investigadores, académicos y productores agrícolas de todo el mundo. Urban Farms es la única empresa de toda Latinoamérica que apuesta por la agricultura controlada, dijo Proenza.
