A pesar de que el crecimiento ha sido del 27 por ciento, estas cifras podrían ser mayores si la situación con el tipo de cambio del euro no hubiera impactado con la oferta chilena a mitad de campaña.EEUU y Canadá concentran el mayor volumen con un 67 por ciento de los envíos, cantidad que se vio incrementada en 20 puntos. Sin embargo, las expediciones a Asia y Europa registraron el mayor crecimiento, aumentando un 40 y 27 por ciento, respectivamente.
El aumento hacia el mercado asiático se debe al aumento de la demanda producida por parte de China (45 por ciento) y Corea del Sur (49 por ciento). Esto es un reflejo del esfuerzo que está realizando la industria chilena por desarrollar la tecnología poscosecha para permitir que la fruta llegue a todos los mercados en buenas condiciones, señala el presidente de Asoex, Ronald Bown.
La temporada finalizó más tardía de lo habitual debido a las buenas condiciones de producción en la zona sur del país y a la disponibilidad de frutos con alta calidad. Las perspectivas de crecimiento para el sector son óptimas, ya que se está estimulando el consumo y abriendo nuevos mercados de exportación.
Sin embargo, el tipo de cambio del euro, la desaceleración económica en el gigante asiático y los problemas derivados con el mercado ruso, están planteando problemas para la industria chilena. La competencia dentro del sector del arándano es cada vez mayor, ya que cada vez hay más países proveedores.
