La oferta de tomates en septiembre ha caído de manera significativa en España y, por este motivo, en la jornada de ayer el tomate grueso se elevó por encima de los 1,20 euros en origen.
El motivo de este descenso se debe al retraso de entrada en campaña de la producción almeriense en 2-3 semanas y el fin anticipado de la campaña de Zafarraya, debido sobre todo a un mal mes de agosto, que ha desanimado a algunos productores y han terminado por adelantar el cierre de campaña.
Durante el mes de septiembre, España siempre ha manejado una oferta de unas 70.000 toneladas, de las que más del 50 por ciento correspondía al tipo verde ensalada, muy apreciado por el mercado español y el resto a tomate rojo para exportación, que en su mayoría provenían de las primeras partidas de Almería y Granada.
El retraso de campaña en Almería está provocando un desequilibrio de la producción, que se mantendrá hasta finales de septiembre.
