García-Legaz considera que, aunque es necesario seguir evolucionando en la apertura de los mercados agrarios, ha de hacerse "de una forma equilibrada y garantizando que todo el mundo pone su granito de arena".
"Lo que queremos es que todos abramos nuestros mercados, que efectivamente eliminemos barreras al comercio pero, al mismo tiempo, que también hagan un esfuerzo aquellos países que han cosechado un desarrollo importante en los últimos años", abundó.
García-Legaz valoró la "profunda" reforma que Europa ha hecho de su Política Agraria Común (PAC), la cual le permite acudir a esta cumbre "con una posición cómoda".
"Hay otros países que no han hecho sus deberes. Nosotros hemos hecho esfuerzos muy grandes en términos de subsidios a las exportaciones", dijo, en relación a la petición de los países africanos de eliminar estas ayudas para facilitar la venta exterior de sus productos.
El secretario de Estado aseguró que los países europeos han reformado "profundamente" los subsidios a la producción agraria para hacerlos compatibles con las normas de la OMC, mientras que "otros países desarrollados fuera de Europa quizás no están por esa misma labor".
"Quizás el mensaje crítico va dirigido no tanto a Europa como a otros países desarrollados", aclaró.
Así, pidió que todos los países desarrollados "hagan ese mismo esfuerzo que ha hecho antes Europa", y que los países en vías de desarrollo "también asuman su parte de responsabilidad en el sistema multilateral de comercio".
Respecto a las negociaciones que comenzaron hoy, García-Legaz advirtió que un fracaso podría "poner en cuestión" el propio sistema multilateral de comercio y a la propia OMC "como institución capaz de producir resultados en términos de liberalización".
"Estamos en un punto muerto que, salvo sorpresa de última hora, nos va hacer a todos reflexionar sobre dónde estamos y sobre si son necesarios cambios profundos en la propia OMC", abundó.
Todavía hay posturas "encontradas" entre bloques de países miembros, sin que se hayan producido avances en los últimos meses ni semanas, indicó García-Legaz.
Si no hay acuerdo, será "un fracaso adicional de la OMC, que en 14 años habrá sido incapaz de ofrecer un resultado razonable de una Ronda como la de Doha".