En relación a los grandes retos a los que se enfrenta este sector para consolidar su liderazgo en España y en el mundo, Pardo ha reiterado la necesidad de concentrar la oferta y defender los intereses españoles en Bruselas frente a países terceros.
En la actualidad, según ha recordado, hay unos doscientos operadores vendiendo los mismos productos, y al final «nuestro propio enemigo somos nosotros mismos». Tras subrayar que el sector «ya se está moviendo» hacia la concentración de la oferta mediante distintas fusiones, ha abogado por que estas operaciones culminen pronto, «antes de que la situación sea irremediable». Ha pedido a la Administración que «ponga todo su empeño» en proteger los intereses del campo andaluz frente a países terceros como Marruecos, Senegal o Turquía y que exija a las autoridades de control de la UE. Andalucía es la primera comunidad de España y la primera región del mundo en producción de productos hortofrutícolas en invernaderos, con una extensión de 37.000 hectáreas, una facturación en 2008 de 2.896 millones de euros y una producción anual de 2.536.819 de toneladas.
