Internacional

Entra en vigor el acuerdo clave en el futuro de la relación entre la UE y Japón

Japón y la Unión Europea iniciaron hoy un nuevo marco en sus relaciones comerciales con la entrada en vigor de un acuerdo sobre eliminación de aranceles que ofrece un mensaje claro contra el proteccionismo que está intentando ganar terreno.

El Acuerdo de Asociación Económica, firmado entre las dos partes en julio pasado en Tokio, crea la zona comercial mayor en todo el mundo, con el 36,9 % del comercio global y con el 27,8 % del producto interno bruto (PIB) del planeta.

Para Japón, uno de los países que ha dejado clara su apuesta por el libre comercio, representa un paso adicional tras la entrada en vigor, el 30 de diciembre pasado, del acuerdo de libre comercio transpacífico conocido por sus siglas de TPP-11.

«Ahora que estamos viendo movimientos proteccionistas en el mundo, este acuerdo está basado en reglas libres y justas que generan beneficios para la UE y para Japón», afirmó hoy en un acto oficial el ministro japonés de Agricultura, Takamori Yoshikawa.

Yoshikawa participó con otros altos funcionarios nipones y los embajadores de los países de la UE en un acto oficial en la delegación europea en Tokio para celebrar el éxito de cinco años de esfuerzos que se dedicaron a forjar este pacto.

En el evento, el ministro de Revitalización Económica, Toshimitsu Motegi, expresó la «gran preocupación» que existe por el surgimiento del proteccionismo «y los riesgos asociados que afronta la economía mundial».

«Japón y la UE tienen que liderar el movimiento para que se extiendan por todo el mundo reglas comunes libres y justas en el siglo XXI», insistió Motegi.

Horas antes, desde Bruselas el presidente de la Comisión Europea (CE), Jean-Claude Juncker, destacó no sólo las ventajas prácticas que tendrá este acuerdo para los consumidores europeos y nipones, sino también el mensaje político que aporta.

Este acuerdo, dijo, «muestra que el comercio consiste en algo más que cuotas y aranceles o millones y billones, consiste en valores, principios, equidad», dijo Juncker.

El acuerdo implica que el 99 % de los productos que los países de la Unión Europea importan de Japón tendrán un arancel 0, a partir de hoy o progresivamente, algo que afectará también al 94 % los productos europeos que llegan a Japón.

Por ejemplo, el vino europeo que llega ahora a los mercados de Tokio, gravado con un 15 %, estará libre de arancel desde hoy. El queso europeo tendrá que esperar, ya que ahora tiene un 29,8 % de arancel, que se irá reduciendo progresivamente en quince años.

El queso, no obstante, no es un producto de gran consumo en Japón, comparándolo con el de Europa. Además, los productores nipones del norte de país están viendo con recelos este acuerdo, por lo que el impacto tiene un efecto amortiguado.

El pescado que exporta Japón a Europa, actualmente con un arancel desde el 0 hasta el 26 %, no tendrá ninguna carga a partir de ahora, mientras que los automóviles nipones, gravados con el 10 %, tendrán arancel 0 en 2026, en una reducción progresiva.

El año pasado, el intercambio comercial entre Japón y la Unión Europea alcanzó los 18,91 billones de yenes (151.803 millones de euros), un 11,53 % del total de las exportaciones e importaciones niponas.

Ese intercambio fue deficitario para Japón, en 487.602 millones de yenes (3.914 millones de euros). El primer socio comercial de Japón es China, y el segundo Estados Unidos.

La entrada en vigor del acuerdo de libre comercio entre la UE y Japón, aunque en las aduanas los efectos sólo afectan desde las últimas horas, ha sido celebrada en Japón con ofertas de precios europeos rebajados.

En supermercados como los de la firma Aeon o en tiendas de barrio como los de la cadena 7-Eleven se podrían ver ofertas de estos productos, destacando las siglas de EPA, para el Acuerdo de Asociación Económica en inglés.

Los cálculos de los analistas anticipan que, gracias a este pacto, que beneficia a unos 635 millones de personas, las importaciones japonesas desde la UE pueden llegar a aumentar hasta el 34 %.

De momento, en Tokio fue tiempo de celebraciones, como el acto en la delegación de la UE en Tokio, donde las personalidades asistentes pudieron participar en una ceremonia de «kagamibiraki», en la que se rompen las tapas de barriles de sake para poder ser consumidos.

Y es que, como se destacó antes de la ceremonia, el acuerdo que entra en vigor hoy permitirá a los japoneses disfrutar del vino europeo sin aranceles, y a los europeos lo mismo con el sake que llega desde tierras niponas.