El Instituto de Economía Agraria, LEI, encuadrado en la Universidad de Wageningen, ha dado a conocer un primer
análisis, aún provisional, sobre los resultados de la actividad agraria en Países Bajos en 2009.
El estudio expone que, con carácter general, la recesión económica generada por la crisis financiera y crediticia, ha
golpeado fuertemente al sector agrario. Para un país con el peso que la exportación tiene en el conjunto de la economía
agraria como es Países Bajos, las dificultades crediticias y la debilidad de los tipos de cambio de muchas monedas no
han sido fáciles de superar. Además, los precios internacionales se redujeron considerablemente, como consecuencia
de la disminución de la demanda en muchos mercados. Esta es la causa principal de unos resultados adversos, que ya
en 2008 habían sido desfavorables con respecto al año anterior; los bajos precios han compensado escasamente los
costes de producción, con la consiguiente reducción profunda de la renta.
Sin embargo, el impacto de la crisis sobre las rentas no ha sido igual en los diferentes sectores agrarios, que la han
sufrido de manera diversa, llegando, en algunos supuestos, a los números rojos. Prácticamente todos los sectores han
visto reducida su renta, con la excepción de la avicultura y, especialmente, las explotaciones de gallinas ponedoras, que
han incrementado la renta con relación a 2008 de forma muy significativa.
Para el conjunto del sector agrario, el ratio entre ingresos y costes ha pasado de un índice de 90 en 2008 a 83 en 2009,
mientras que la renta media por unidad de trabajo-año no remunerada ha pasado de 26.000 a 3.000 . La renta media
por explotación se ha visto reducida a 24.000 en 2009, frente a los 56.000 del año anterior.
Si bien la producción ha crecido en 2009 un 3% en volumen, los precios han caído casi un 9%, lo que se ha traducido en
una disminución del valor de la producción final agraria hasta los 22.500 millones de , incluyendo servicios.
El valor de la producción agrícola cayó el 4,5% y el de la producción ganadera casi el 11%. Los valores de la producción
anual son similares para los sectores hortícola y ganadero, algo más de 8.500 millones de cada uno de ellos, mientras
que los cultivos arables superan los 2.000 millones de .