Hasta el 30 de julio, todos los establecimientos del mercado de la Llibertat señalizarán los productos de proximidad y ecológicos con una etiqueta distintiva, con el fin de asegurar y aumentar la presencia de este tipo de producto en los mercados y facilitar su compra.
Según el ayuntamiento, el objetivo es que al final de la prueba se incremente hasta un 10 % la oferta de productos de proximidad en función del porcentaje de oferta del punto de partida de la prueba piloto.
Cuando termine la prueba piloto, el instituto Municipal de Mercados de Barcelona ha previsto extender la iniciativa a otros 25 mercados de la ciudad, con la idea de que los mercados se conviertan en centros de oferta de productos de proximidad y ecológicos, se identifique la oferta, se promueva su consumo y contribuir a hacer de Barcelona una ciudad más sostenible y más saludable.