El consumo de pera sigue cuesta abajo y por desgracia no se ve el fondo. La realidad es que su ingesta con los años ha menguado notablemente al igual que determinadas frutas, pero no con unas cifras tan llamativas.
En concreto, en 2010 cada español consumía como promedio 7,1 kilogramos per cápita de pera, pasando por los 5,49 kilos en 2015, pasando por los 4,71 kilos por persona registrados en 2019, hasta llegar a los 3,4 kilos per cápita en 2024, unos guarismo que que no llaman al optimismo. En el año 2024 el gasto por persona en esta fruta de pepita para consumo en el hogar se cuantificó en 7, 37 euros per cápita.
Pese a los esfuerzos en la investigación de nueva materiales, ya que existen más de un centenar de variedades de pera para que el consumidor pueda elegir entre los distintos gustos y sabores. Lo cierto es que hay variedades que gozan de más tirón que otras como puede ser la pera conferencia.
En la actualidad en los lineales de los supermercados o en las fruterías tradicionales reina la pera conferencia, a mucha distancia se sitúan la pera blanquilla y la Rocha de Portugal.
Si bien es cierto que en España el gusto por las variedades si ha experimentado un notable giro, ya que el consumidor demanda peras del tipo conferencia en detrimento, por ejemplo de la blanquilla, aunque sigue manteniendo un consumidor fiel.
