La comarca del Maresme, a pesar de haber perdido en los últimos 30 años el 75 por ciento de sus explotaciones agrarias y más del 49 por ciento de su superficie agrícola útil, todavía mantiene un importante potencial como uno de los principales territorios productores de verduras y hortalizas.
El principal problema que encuentra el sector para expandirse es la comercialización dominada por la gran distribución "que prioriza el producto de bajo precio y con el cual la huerta del Maresme lo tiene difícil para competir", han señalado desde el Consell Comarcal.
Ante esta situación, se apuesta por encontrar nuevos canales alternativos de comercialización a partir de los llamados "circuitos cortos", que facilitan que, como máximo, haya un único intermediario entre el producto final y el consumidor.
El modelo a seguir, según se plantea en un estudio realizado a partir de entrevistas a payeses y a empresas que gestionan comedores escolares de la comarca, pasaría por crear una Central de Compras capaz de alcanzar la demanda de los grandes consumidores como son la restauración, mercados o agrotiendas.
Así, como primer paso, se ha planteado iniciar una experiencia piloto con los comedores escolares el próximo curso.
Con esta propuesta sobre la mesa, se abre ahora un periodo de dos meses para que productores, centros educativos y empresas gestoras de comedores escolares manifiesten su interés por participar en esta prueba y se empiecen a definir las bases de funcionamiento de la Central de Compras.
El presidente del CCM, Miquel Àngel Martínez, ha destacado que se apoyarán todas aquellas experiencias que beneficien al territorio ya sea desde una vertiente social, cultural o económica.
El estudio de viabilidad de una Central de Compras de productos agrícolas y de proximidad del Maresme ha sido impulsado por el servicio de Productos de la Tierra Maresme, con el apoyo de la Diputación de Barcelona.
Este servicio comarcal apuesta para fortalecer a los pequeños productores de la comarca ayudándoles en la comercialización de sus productos para fomentar una cultura de consumo de proximidad.
