Los datos más recientes del Observatorio Socioeconómico del Cooperativismo Agroalimentario Español (OSCAE) indican que existen 3.838 empresas cooperativas en el sector agroalimentario en España, que agrupan a más de 1.175.000 socios (de los cuales más de un millón son socios productores) y que dan empleo a 96.220 trabajadores.
Facturación
La facturación total del sector cooperativo agroalimentario español asciende a 26.183 millones de euros, lo que representa el 30 por ciento del total de la industria agroalimentaria del país. Asimismo, las cooperativas de frutas y hortalizas suponen el 24 por ciento del total del sector cooperativo agroalimentario y su facturación es el 25,4 por ciento del total, aproximadamente.
Jesús Palma, gerente de la cooperativa Hortoventas, hace hincapié en las facilidades que supone la figura de la cooperativa para el sector de la alcachofa, determinadas por dos factores fundamentales: “Por un lado, el abaratamiento de costes, ya que el agricultor dispone de infraestructuras y servicios necesarios que sería imposible tener de forma individual.
Por otro lado, la comercialización porque no sería posible que las pequeñas producciones fueran distribuidas por separado por sus propios titulares”. Esta cooperativa es líder en la producción de alcachofa en Granada, especialmente en la temporada de verano, y cuenta con 300 socios y 1.100 asociados, además de generar 40 puestos de trabajo directos.
También destaca la cooperativa Agrícola San Blas en la producción de esta verdura, el mayor productor y distribuidor de alcachofa IGP Tudela, con cuatro millones de kilos mercantilizados. “Es un cultivo que está creciendo geométricamente en los últimos años y la calidad de nuestra zona se valora en todo el mercado nacional”, indica su gerente, Eduardo Ramírez. Con 50 agricultores socios en total, 30 de ellos trabajan en el sector de la alcachofa.
“La cooperativa es una vía de comercialización, principalmente, y el gestor que facilita la logística de envases, transporte, almacenaje y clasificación del producto. A su vez también facilitamos la gestión administrativa de temas de papeleo al agricultor y financiamos el pago de una forma muy cómoda para el socio”.
Futuro
Desde la asociación Alcachofa de España se resaltan tres fortalezas de futuro que ofrece pertenecer a una cooperativa a los pequeños agricultores de alcachofa:
– Tener como punto de partida una de las mejores infraestructuras y un equipo humano experimentado que pueda llegar a garantizar la puesta en el mercado de un producto de forma continua, cumpliendo con los estándares de calidad y seguridad establecidos.
– Rápida adaptación a las exigencias tanto de mercado, legales y seguridad, como de calidad, que sean necesarias, en relación al cultivo, normalización y comercialización.
– Concentración de la oferta obteniendo un volumen sustancial que pueda hacerse hueco en el mercado.