El gerente de Driscoll, Teho Houwen, ha destacado que el empuje de las ventas de berries en los países nórdicos y Países Bajos durante2015 ha sido sólo el inicio. Según Houwen, la calidad de los frutos rojos en los mercados se está incrementando además de adaptarse a las necesidades de los consumidores, ya que las cadenas minoristas ofrecen frutos rojos durante todo el año.
El directivo enfatiza que cuando se conocer al comprador se puede hacer una gran diferencia en un mercado cada vez más asentado. De hecho, “te das cuenta de los consumidores de frutos rojos gastan incluso hasta dos veces más que los consumidores regulares”, explica Houwen.
Por ello se apoya a los minoristas para sacar el máximo partido de estos frutos en la tienda y aumentar de esta forma el volumen de negocio. Noruega y Dinamarca son claramente dos mercados con una tendencia alcista en el consumo de berries y que incluyen estos frutos en su dieta diaria.
Con el objetivo de satisfacer las expectativas del consumidor, Driscoll sigue desarrollando variedades únicas, publica fruitnet.com. “Gracias a los estudios de consumo, se obtiene información clara sobre los criterios del consumidor. Esto puede variar en función del país, ya que por ejemplo los consumidores franceses tienen preferencia por los berries aromáticos, mientras que el dulzor es la primera elección del consumidor alemán”, destaca Houwen.
Sin embargo, parece ser que los consumidores europeos tienen una cosa en común, ya que persiguen una calidad constante durante todo el año. Por ese motivo, Driscoll se está centrando en establecer una cooperación a largo plazo con productores independientes en Europa y África, ya que trabajan con altos estándares de calidad.
Al mismo tiempo están invirtiendo en la cadena de frío para mejorar la gestión de temperatura y aumentar la vida útil de las frutillas para que se conserven frescos durante más tiempo en la tienda.