La Junta Directiva de la Asociación de Cosecheros y Exportadores de Almería (Coexphal), reunida el pasado lunes 16 de junio, fue informada de una serie de sucesos relacionados con la SAT Agroiris, por lo que decidió proponer a la Asamblea General de Coexphal la expulsión de esta empresa.
Esta situación ha sido motivada principalmente por el retraso e incumplimiento de las obligaciones económicas de Agroiris con la Asociación.
Los estatutos de Coexphal recogen expresamente el deber del pago puntual de las obligaciones económicas por parte de los asociados, así como facilitar los datos para elaborar los informes estadísticos preceptivos. «Ninguno de estos dos extremos han sido cumplidos por Agroiris», afirma el comunicado remitido por la asociación.
Todas las empresas de Coexphal han participado en la campaña de promoción de la Interprofesional para mejorar la imagen de la agricultura almeriense, tal y como se acordó democráticamente en la última Asamblea de Coexphal. «Este acuerdo no ha sido respetado por la SAT Agroiris, que tampoco ha colaborado económicamente en esta campaña», matiza Coexphal.
Además Agroiris «ha incumplido la obligación de confidencialidad y discreción sobre deliberaciones y acuerdos de los órganos internos de Coexphal, a los que Agroiris pertenecía hasta la adopción del acuerdo referido», denuncia el comunicado.
El incumplimiento «grave de todas estas normas estatutarias es causa de perdida de la cualidad de socio, por lo que la Junta Directiva votó y acordó por mayoría el pasado 16 de junio proponer a la Asamblea la expulsión definitiva de la SAT Agroiris», puntualiza.
Esta decisión no se hizo publica en su momento «porque Coexphal entendía que las incidencias económicas y sociales deben solventarse internamente, para no perjudicar a la base social de Agroiris, ni ensuciar la imagen del sector».