Bélgica, España, Francia, Italia y Grecia pidieron ayer medidas «transitorias» para que en 2008 no se interrumpan los programas para costear el gasto del reparto gratuito de frutas y verduras retiradas del comercio, que los productores llevan a colegios y centros caritativos. España respaldó, junto con los otros países citados, una petición presentada ayer por Bélgica al Consejo de Agricultura de la UE en la que se constatan los problemas que tienen este año las organizaciones de productores hortofrutícolas (OP) para donar su producción retirada a centros escolares o caritativos. Bélgica aludió a las dificultades legales en la financiación de ese tipo de actuación, lo que podría provocar la interrupción de dicho reparto gratuito, el cual sirve para completar la «dieta de miles de personas que carecen de medios de subsistencia».
Nacional Ene 2008