Agentes del dispositivo de vigilancia desplegado en una de las explotaciones agrícolas observaron a dos personas cargando cajas de aguacates en una furgoneta que, al percatarse de la presencia de la Guardia Civil, cerraron el vehículo y se encerraron en la caseta de aperos de donde sacaban las cajas.
Tras una inspección de la caseta y del vehículo, encontraron 1.500 kilos de aguacates repartidos en 12 cajas de plástico y 28 sacos.
La mercancía podría proceder de un robo perpetrado en una finca de la Garnatilla cuyo propietario denunció la sustracción de unos 5.000 kilogramos de aguacates.
En el marco de esta operación fueron detenidas otras tres personas por su presunta relación con los hechos, entre ellas el agricultor que vendía la fruta sustraída en cooperativas de la zona.
Los otros detenidos, aunque están registrados como agricultores, no son productores de aguacates y necesitaban un contacto que pudiera dar al fruto una apariencia legal para su entrega a los operadores agroalimentarios.
La Guardia Civil continúa las gestiones para localizar los kilos de aguacates que faltan, por lo que no se descartan nuevas detenciones.
