A mediados del pasado marzo, el sector cítrico español reclamó a Bruselas acciones concretas en ese sentido, antes del inicio de la nueva campaña de importación.
"La Comisión ha iniciado la elaboración de requisitos adicionales para la importación de cítricos procedentes de Uruguay debido al alto nivel de incumplimiento durante la campaña de importación de 2015", dijo el comisario europeo de Sanidad, Vitenis Andriukaitis, en respuesta a una pregunta parlamentaria del diputado del PP Ramón Luis Valcárcel.
Además, "la Comisión llevó a cabo una auditoría en Argentina en febrero de 2016 para evaluar el sistema oficial de control y certificación para la exportación de cítricos a la UE", añadió.
"Se ha previsto una auditoría similar en Uruguay y en Sudáfrica para los meses de abril y de junio de 2016, respectivamente", explicó el comisario.
Andriukaitis dijo que, "sobre la base de la información disponible, la Comisión revisará las medidas de emergencia vigentes (una decisión adoptada en 2014 para Sudáfrica y otra de 2004 para Brasil) "a fin de reforzar la protección de la UE contra la mancha negra (Guignardia o Phyllosticta citricarpa) durante la campaña de importación de 2016".
Añadió que, "en caso de notificaciones de intercepciones recurrentes" por la presencia de esa plaga, "la Comisión evaluará la situación para, en su caso, adoptar nuevas medidas" y que "las medidas de emergencia podrán revisarse en cualquier momento".
En relación con la armonización de los controles fitosanitarios, recordó que "la legislación específica de la UE establece los controles fitosanitarios obligatorios que deben realizarse en la frontera del territorio de la UE a todos los cítricos procedentes de países no pertenecientes a la Unión".
En ese contexto, añadió, la Comisión lleva a cabo auditorías para comprobar que las inspecciones de importación se realizan de conformidad con la legislación de la UE.
Además, organiza formaciones específicas para contribuir a la armonización de los controles fitosanitarios a nivel de la Unión.
La carta del sector español a la CE la enviaron las Cooperativas Agro-alimentarias, las organizaciones profesionales agrarias (Asaja, COAG y UPA), el Comité de Gestión de Cítricos y la Asociación Interprofesional de Limón y el Pomelo.
Por su parte, Valcárcel dijo que "teniendo en cuenta la llegada de la campaña de exportación y el carácter estratégico del sector citrícola en Europa (600.000 hectáreas que pueden estar expuestas a la propagación y contaminación de la mancha negra), es necesario que la Comisión no minusvalore el riesgo y vigile de cerca las importaciones de otros países.
"La amenaza de Sudáfrica se suma a la de cítricos de otros países que ya han demostrado o confirmado en 2015 su inseguridad como Uruguay, que acumuló 70 interceptaciones de Phyllosticta citricarpa, Argentina (17) o Brasil (13)", recordó.
Por ello, preguntó a la CE si había previsto el despliegue de medidas excepcionales para impedir la introducción y propagación de este tipo de plagas o si tiene previsto la Comisión preparar una reacción automática para que, si Sudáfrica vuelve a enviar fruta contaminada y se registran más de 5 interceptaciones, se cierre la frontera.
También le demandó que precisara si la CE prevé poner en marcha una estrategia de protección que coordine y armonice los servicios de inspección en la frontera.