Los cambios, que se aplican a partir del 1 de julio, afectan a la normativa que permite asignar ciertas categorías de subvenciones en los citados sectores sin previa notificación a Bruselas.
Por ejemplo, en el futuro los países podrán dar ayudas en el ámbito forestal y a ciertas pymes en áreas rurales "sin tener que pasar por largos procedimientos de notificación y autorización", precisó el Ejecutivo comunitario en un comunicado.
Además, se ha ampliado el alcance de las nuevas directrices para las ayudas estatales en los sectores agrícola y forestal y las áreas rurales entre 2014 y 2020, que recogen los criterios que analiza la CE para decidir si se respetan las normas del mercado interno.
El comisario europeo de Agricultura, Dacian Ciolos, dijo que las nuevas normas permitirán a los potenciales beneficiarios obtener ese tipo de subvenciones "con mayor rapidez".
Según Ciolos, las disposiciones "mejorarán la eficiencia de los temas de ayudas estatales mediante la aceleración de los procedimientos y el recorte de la burocracia para las autoridades públicas".
Los cambios anunciados se enmarcan en la iniciativa de la CE para modernizar las ayudas estatales con el objetivo de impulsar el crecimiento y la competitividad en los Veintiocho.