La entidad también ha establecido un protocolo de actuación para atender, a través de un canal distinto y con carácter de urgencia, las solicitudes de los clientes con siniestros en sus cultivos, invernaderos, hogares y establecimientos comerciales asegurados en la cooperativa de crédito granadino, ha informado en una nota.
Directivos y técnicos de Caja Rural de Granada se han desplazado hasta la zona para conocer los daños causados por las lluvias y ponerse a disposición los municipios afectados.
La línea estará destinada a la reconstrucción de invernaderos, la plantación y reposición de cosecha, arreglo de conducciones de riego e infraestructuras, anticipos de la indemnización del seguro, reparación de viviendas y establecimientos comerciales, así como posible reestructuración de deuda.