En la actualidad, Bio C’Bon -que apuesta por los alimentos ecológicos y de proximidad-, cuenta con 75 establecimientos en Francia (la mayoría), Italia y España (1), aunque esperan llegar al centenar de aquí a diciembre en esos tres países.
"La empresa está en plena expansión", ha asegurado Herzog, y "España es un buen sitio para abrir" -es uno de los grandes países productores de alimentos ecológicos, aunque el consumo interno es aún bajo-, porque a su juicio el interés de los españoles por este tipo de productos, más respetuosos con el entorno, es cada vez mayor.
La idea de la empresa es que una familia pueda llenar toda la cesta de la compra en sus supermercados.
Los productos que venden corresponden a distribuidores españoles -ya que apuestan por el comercio de proximidad para minimizar así también el impacto medioambiental-, aunque hay alimentos, "sobre todo, algunos envasados, que no se elaboran en el mercado español" y son importados.
No obstante, Herzog ha apuntado que la mayor parte de la oferta son alimentos frescos (frutas y verduras, carne al corte o charcutería) y de temporada de agricultores y ganaderos españoles, y a granel (más de 115 referencias de legumbres, cereales, pasta, frutos secos, galletas, hierbas aromáticas, tés o gominolas, entre otros productos).
Ha resaltado su competitividad en precios "en producto fresco", aunque ha precisado que el alimento ecológico, con técnicas agrícolas más respetuosas con el entorno, tiene un método de producción que encarece algo el producto final, aunque "el diferencial no es tan elevado".
En la Unión Europea los ecológicos son, de media, entre un 15 y un 20 por ciento más caros que los convencionales, porcentaje que en España se eleva algo, porque "aún no hay ni mucha oferta, ni demanda", y uno de los retos es desarrollar los puntos de venta de estos productos y facilitar el acceso a ellos.
En ese sentido, Herzog ha avanzado que su objetivo es "bajar el precio lo máximo posible, porque entendemos que el alimento ecológico no es un lujo", y cita como ejemplo que un kilogramo de lenteja pardina eco de Castilla y León cuesta 2,3 euros o un kilo de pera bio, 2,18 euros.
Respecto al lugar de la capital donde tiene previsto abrir su próximo supermercado, Herzog no ha querido desvelar la ubicación, porque "buscamos en todo Madrid", eso sí, "tiene que ser un local grande y bien situado".
El que tiene en la actualidad en un céntrico barrio madrileño dispone de 450 metros cuadrados de superficie y alberga en torno a 6.500 referencias de productos ecológicos.