Aguado ha asegurado que AVA "no puede estar en contra" de la agricultura ecológica porque la organización está formada por veintiocho sectoriales, una de ellas de agricultura ecológica, pero sí ha criticado que en este primer año de legislatura del Gobierno valenciano se haya priorizado la ecológica.
Según ha explicado ante la comisión de Agricultura de Les Corts, existen 160.000 hectáreas de cultivo abandonado en la Comunitat Valenciana, y la agricultura convencional -que representa el 90 % de la existente en la Comunitat Valenciana- tiene "gravísimos" problemas de rentabilidad, especialmente en la cadena agroalimentaria.
"¿Qué es más importante atender, al que está en peligro de desaparecer y morir, o un sector como el caqui o la agricultura ecológica? Nuestra posición no es de crítica, sino de prioridad", ha asegurado el presidente de AVA, que ha pedido actuar "objetivamente, y no románticamente".
Ha defendido que la agricultura, tanto la ecológica como la convencional, está sujeta a reglamentos europeos que encaminan toda la producción a la sostenibilidad ambiental.
La agricultura europea es "la más respetuosa con el medio y la más segura con las personas de todo el planeta", según Aguado, que ha instado a hacer "despacio" los "experimentos" para un trasvase masivo de la agricultura convencional a la ecológica para no alterar el equilibrio entre la oferta y la demanda.
"Es un tema de formas", ha señalado Aguado para explicar que el protagonista es el agricultor y es él quien tiene que decidir "si quiere o no" un tipo de agricultura u otra, y ha añadido que se está negociando con la Conselleria sobre esta cuestión.
Desde Compromís se ha defendido el interés del Gobierno valenciano por la agricultura ecológica como filosofía por considerarla el futuro y por ello fomenta que se dé el paso a este tipo de cultivos, como ha ocurrido en Dinamarca, si bien han asegurado que no se va a acabar con el sistema actual en dos días.
Aguado ha respondido que en Dinamarca "todo puede ser ecológico, porque tienen el clima de cara, pero en el sur de Europa no, y con el cambio climático que nos viene todavía menos".
El grupo Podemos ha señalado que se debería potenciar más la agricultura ecológica porque la agricultura lleva veinte años con un modelo que no está dando solución a los agricultores, frente a otro modelo que presenta rentabilidad.
Cristóbal Aguado ha hecho un diagnóstico de la situación del sector agrario, que tiene como principales problemas el tamaño de las explotaciones, los "abusos" de las comercializadoras, la sanidad animal y vegetal, las "graves carencias" en I+D+i y la escasez de recursos hídricos.
Ha reclamado al Consell que tome la iniciativa y decida si el sector agrario es considerado estratégico o no, y que los partidos gobernantes negocien un plan agrario con el sector y lo consensúen con el resto de grupos políticos para que sea un proyecto para 15 o 20 años.
Sobre el Instituto Valenciano de Investigaciones Agrarias (IVIA), ha alertado del número de plazas vacantes sin cubrir y ha criticado la "actitud personal" de algunos investigadores.
Respecto a los recursos hídricos, ha indicado que si se llenaran algunos pantanos "habría agua suficiente para toda Valencia", y se ha referido al Tajo, el Duero y el Guadiana como posibles proveedores de agua.
Ha citado como ejemplo el agua que da el Tajo a Portugal "para desaguar", que se podría utilizar para otros fines, así como "la posibilidad" de Extremadura, donde "sobra agua por un tubo", y ha exigido despolitizar la cuestión hídrica.
Sobre los acuerdos comerciales del Atlántico y el Pacífico, ha opinado que si no conllevan libertad de mercado "sin discriminaciones" serán "un abuso".
Se ha referido también a la ‘pinyolà’, una cuestión que necesita una solución pactada y dotada con fondos públicos.