Las nuevas medidas se centran en la técnica de los insectos estériles mediante la cual estas moscas no tienes descendencia. Billones de moscas de la fruta machos estériles serán lanzados en una proporción de 50 millones por semana para eliminar la amenaza de la invasión de esta plaga.
Desde la Universidad de Macquarie se ha informado de que el proyecto, conocido como Qfly, se ha presentado difícil y costoso y gran reto para la bioseguridad en Australia. La mosca de la fruta, especialmente en Queensland, presenta un gran desafío para la producción hortícola australiana. Australia depende los insecticidas sintéticos para proteger los cultivos, pero están prohibidos para muchos usos, señala Fruitnet.
Por ello son precisas medidas alternativas sostenibles con el medio ambiente. El gobierno ha invertido tres millones de dólares para contrarrestar el brote de esta enfermedad.