Con el arranque de la nueva campaña de limón 2009-2010, ASAJA Murcia aconseja al agricultor utilizar el contrato de compraventa de limones con destino a su comercialización en fresco. En palabras de su secretario general, Alfonso Gálvez Caravaca, de esta manera los productores pueden exigir el precio en sus contratos y estipular claramente qué tipo de fruta es la que consta en la transacción, tanto su calibre como su maduración y condiciones de recolección, entre otras cuestiones.
De esta forma, el agricultor puede acogerse a esta legislación para firmar sus transacciones comerciales bajo unas condiciones que le aseguren un trato justo por parte de los compradores, gracias a la posibilidad de fijar mediante este documento cualquier tipo de detalle que se requiera y que garantice la operación, según apunta Gálvez Caravaca.
El fin que se persigue con la puesta en marcha de este tipo de contratos relativos a la compraventa de cosecha no es otro que se conviertan en las herramientas legales más adecuadas para poder regular con nitidez la relación contractual que se establece entre los vendedores y los compradores de limón durante cada temporada.
No hay que olvidar que, tradicionalmente, este tipo de relaciones económicas se ha venido realizando a través de un simple albarán o bien a través de un pacto verbal, lo que situaba al agricultor en una situación de indefensión respecto a cualquier complicación que surgiera a lo largo del intercambio comercial.